Concejales dilatan revocación de arrendamientos fraudulentos de terreno de excombatiente

Concejales de Presidente Franco dilatan el tratamiento de anulación de arrendamientos fraudulentos a favor de terceros sobre un terreno municipal que perteneció al extinto excombatiente de la Guerra del Chacho, Filomeno González. Uno de los arrendamientos está a nombre del hijo exintendente ya fallecido, Miguel Medina, de nombre Diego Medina, actualmente preso por narcotráfico. El abogado de la familia pidió que los ediles se constituyan al lugar para constatar que la familia González es la que ocupa el inmueble.

Ayer, durante la sesión ordinaria, el abogado de la familia afectada, Severiano Agüero, pidió a los concejales miembros de obras y legislación se constituyan en el terreno para corroborar cuánto se han burlado la familia Medina de la misma Junta, ya que no existe obra alguna comprometida por Diego Medina Otazú, a quien le habían dado en compra directa y transferencia, inclusive, sin que resida en el predio.

El abogado pidió la inmediata acción de nulidad de los arrendamientos al presidente de la Junta, Roberto Brizuela (PLRA), mencionando además que la familia recurrirá a instancia judicial por cualquier maniobra que siga perjudicando a los hijos del excombatiente. 

El inmueble tiene una dimensión de una hectárea, ubicado en el barrio Tres Fronteras, a poca distancia del río Paraná, una zona codiciada debido a la construcción del Puente de la Integración que unirá Foz de Yguazú (Brasil) con Presidente Franco (Paraguay). Primeramente, fue vendido por un antiguo morador franqueño, de nombre Jorge Brítez, al excombatiente de la Guerra del Chaco, Filomeno González. Brítez es sobrino de González.

El excombatiente ocupó el terreno durante toda su vida, tras volver de la Guerra del Chaco, y sus cinco hijos se consideran herederos legítimos de la propiedad. En el periodo de administración del extinto intendente Miguel Medina, la viuda de don Filomeno pidió la titulación del inmueble. Sin embargo, Medina, con otros funcionarios y concejales cómplices, se aprovecharon y arrendaron el terreno a su propio hijo, Diego Medina, hoy día preso por narcotráfico.

También arrendaron a nombre de José Grasel, un antiguo playero y amigo de la familia Medina. Grasel reconoció que nunca habitó la propiedad y que el arrendamiento, inclusive, se hizo sin su consentimiento. El año pasado, apareció un título aparentemente falso, presentado por la concejal Bartola Fernández (Indep.), indicando que el terreno en realidad pertenece a un tal Leoncio Martínez.

A raíz de esto, el documento fue derivado al Tribunal de Cuentas para dilatar aún más el estudio. En la Junta Municipal deben anular todo tipo de arrendamientos a nombre de terceras personas de forma fraudulenta, de modo a que los miembros de la familia puedan gestionar la titulación y puedan usarlo como legado legítimo.