Estudiantes de la Universidad Privada del Este (UPE), propiedad de la familia González Vaesken, reclaman el aumento excesivo de los aranceles de la carrera de Medicina. Denunciaron que en plena crisis por la pandemia, la institución subió un 20% el costo de la matricula y la mensualidad. Se trata de un incremento de G. 600.000 frente al promedio de G. 150.000 de años anteriores.
Fachada de la Universidad Privada del Este, ubicada en el km 7 de CDE.
Los alumnos de la UPE se encontraron este año con la sorpresa de los “cuotazos”, lo que pone en aprieto a la mayoría de los jóvenes, ya que no cuentan con recursos suficientes para hacer frente a las nuevas tarifas. Pese a que es una institución privada, la educación no puede tratarse como una mercancía, señalaron los universitarios.
Una alumna del último año de la carrera de Medicina de la sede, ubicada en el km 7 de la capital del Alto Paraná, explicó a La Clave que este año los aranceles subieron abruptamente, sin previo aviso. “Llegar al ansiado último año y no saber si vas a conseguir el dinero para terminar la carrera”, lamentó la estudiante.
Dijo que para cursar el quinto año, pagó G. 2.075.000 por la mensualidad, sin embargo, este año la suma trepó G. 2.875.000, lo que equivale un aumento del 20%. “Muchos compañeros no saben de dónde sacar el dinero porque generalmente cada año sube de G. 150.000 a G. 200.000 la cuota”, acotó.
Consultado sobre la queja, Richard González, director de la Oficina de Defensa del Consumidor de la Municipalidad, explicó que la mayoría de las universidades no cuentan con un reglamento en el que se estipula el cobro de aranceles e insta a los estudiantes a denunciar ante dicha dependencia. “En la universidad se da una oferta-demanda y también existe consentimiento (…) si en el contrato no hay una cláusula que establezca el aumento progresivo de aranceles, el alumno puede denunciar”, detalló el funcionario, al revelar que la mayoría de las instituciones ni siquiera cuentan con estatutos.
Sobre este punto, en el contrato entre la Universidad Privada del Este y el alumno no se especifica sobre el pago de aranceles, pese a que el documento cuenta con seis cláusulas. Esto significa que los dueños pueden cobrar a los universitarios lo que se les antoja, ya que no hay control.
