Al cumplimiento del plazo establecido por la jueza de garantías Carina Frutos para presentar requerimiento conclusivo, el fiscal especializado antinarcótico Manuel Rojas presentó acusación contra dos bolivianos detenidos durante el allanamiento de una vivienda utilizaba como laboratorio clandestino. Se trata de Grover Seña Romero, de 24 años, y Celiz Cruz Moreno, de 47, quienes guardan reclusión en la penitenciaría de Ciudad del Este.
Ambos fueron privados de libertad el 5 de abril del corriente año en posesión de 39,55 kilos de cocaína tipo crack, además de incautar elementos utilizados para el refinamiento de la sustancia prohibida y su posterior comercialización, consistente en cacerolas, paquetes rectangulares de plástico, rollos de cinta de embalar y licuadoras industriales. Asimismo se llevaron bolsas de arpillera, hornallas de metal, microondas, soda cáustica, colorantes de ropa, utilizados para la manipulación, acondicionamiento y mezcla de las drogas, según los técnicos especialistas en la cuestión.
La representación pública pidió a la magistrada que garantiza el proceso eleve la causa para su discusión en contradictorio público, instancia en la que se reserva la petición de la pena. En carácter de anticipo jurisdiccional de prueba, la Fiscalía solicitó la realización de la prueba en laboratorio, a cargo del Dr. Richard Florencio Méndez, cuyo resultado será presentado en la audiencia preliminar. Toda la sustancia estupefaciente incautada fue incinerada en presencia de la jueza del caso en los hornos de la laminadora Minga Guazú, al igual que los demás elementos utilizados para el refinamiento de la sustancia.
Agentes de la policía antinarcótica presumen tráfico internacional debido a la cantidad de droga que se encontraba en poder y bajo dominio de los ahora acusados, pero no descartan la posibilidad que los bolivianos hayan estado haciendo de encargados del laboratorio clandestino al mando de algún “patrón”. La producción de prueba principal sigue pendiente de resultado y consiste en el trabajo de laboratorio.
Los dos acusados actuaron en pleno conocimiento, voluntad y conscientes de causar resultado a través de la comisión del hecho punible, al ser sorprendidos en flagrante posesión de y tenencia de la sustancia incautada. Todas las evidencias materiales fueron acompañadas con la carpeta de actuaciones del fiscal, presentadas ante el órgano juzgador. En la misma causa está procesado en rebeldía Nery Ramón Morínigo, sospechado de tener participación en los hechos investigados.