Pese a las denuncias contundentes, corroboradas con fotos y filmaciones que muestran los abusos cometidos, efectivos de la Armada Nacional siguen usurpando funciones de aduaneros en la cabecera del Puente de la Amistad, en donde la única “ley” que existe es la del capitán de navío Walter Díaz, comandante del Área Naval, quien alega estar respaldado en su ilegal accionar por el presidente Mario Abdo Benítez y el vicepresidente Hugo Velázquez. Son innumerables los negociados cometidos y que dejan pingües ganancias a los efectivos de la Marina, destacados en la frontera paraguayo-brasilera.
Desde el inicio de la pandemia y el consecuente cierre de las fronteras, los marinos se “apoderaron” de un lugar considerado estratégico, el Puente de la Amistad. Desde entonces, vienen cometiendo todo tipo de negociados, presuntamente con la venia de las principales autoridades nacionales. La semana pasada, nos hacíamos eco de las denuncias de camioneros, quienes denunciaban la vergonzosa actuación de los militares.
El fin de semana, logramos captar nuevas imágenes de los atropellos cometidos por el personal de la Armada, que “no le perdona a nadie” en la zona primaria de la Aduana. Así por ejemplo se observa a personas del lado brasilero, llevando medicamentos y ropas en bolsas medianas o pequeñas, que indefectiblemente deben “pasar por las armas” de los marinos, quienes cobran una “tasa” en dólares o reales a cambio de entregar las mercaderías a las personas que están del lado paraguayo.
“ORDEN DE ARRIBA”
Es decir, absolutamente nadie se salva de los abusivos “controles” de estos militares, quienes ante cualquier reclamo señalan que tienen “orden de arriba” y que la zona primaria ahora es “de ellos”, aunque no existe ningún decreto presidencial o de alguna otra institución, que autorice estas fiscalizaciones de la Armada. El administrador de Aduana de CDE, Nelson Fleitas, incluso había reconocido la semana pasada que los funcionarios a su cargo quedaron “desplazados” a raíz de la acción de los navales. El mismo se declaró impotente para hacer algo al respecto, pese a que los marinos no están capacitados mínimamente para ejercer las tareas de fiscalización
Y aunque fingen ser celosos custodios de la frontera, a nadie se le escapa que nuestra zona e incluso el país está “inundado” de contrabando, que ingresa masivamente por el río Paraná. Los famosos puertos “clandestinos” operan a sus anchas, según fuentes fidedignas, los contrabandistas pagan hasta 500 dólares por noche a los marinos, para que les permitan operar por unas horas.
ÁRABES Y BRASILEÑOS
También ingresan ilegalmente muchos brasileños y árabes que viven en Foz y tienen sus negocios en Ciudad del Este, por supuesto a cambio de coimas. En síntesis, una sarta de situaciones que permite a los efectivos de la Armada Paraguaya a “generar dinero” en negro, motivo por el cual estos defienden con uñas y dientes su “dominio” en la zona primaria aduanera.
Hay que recordar que el capitán Díaz es, supuestamente, concuñado del vicepresidente Hugo Velázquez, quien, a su vez, es hermano del comandante de la Armada, almirante Carlos Velázquez, por lo cual Díaz es considerado “inamovible” en el cargo. Según indicaron nuestras fuentes, la única solución a esta grave situación, que representa un atropello a la institucionalidad de la República, sería la normalización del tránsito terrestre y el desbloqueo de las fronteras, algo que ocurriría recién pasado el mes de diciembre del 2020.