Perorata del edil liberal Joselino Chaparro para justificar blanqueo de obras fantasmas

El polémico concejal departamental Joselino Chaparro (PLRA) utilizó ayer la sesión de la Junta Departamental para “despacharse” contra la prensa, a la que acusó de “mentirosa, de diablo y de demonio”, en su particular e histriónico estilo. Esto con relación a obras fantasmas de la Gobernación, que fueron “avaladas” por Chaparro, quien inclusive emitió un dictamen afirmando que las obras en Ñacunday estaban “terminadas”, cuando que en realidad las mismas ni siquiera habían comenzado a edificarse, según lo reconoció la semana pasada el propio secretario de Obras del gobierno departamental, Miguel Restaino.

Recordemos en ese sentido que el concejal Chaparro firmó dictámenes en su carácter de vicepresidente de la comisión asesora de obras del legislativo departamental, en donde por ejemplo daba por concluidas obras que solo existían en los papeles. Sin embargo, en su dictamen, Chaparro hacía constar que dichas obras ya estaban terminadas, produciendo así documentos (de contenido falso) que posteriormente fueron utilizados para aprobar la cuestionada rendición de cuentas del gobernador Roberto González Vaesken.

Ayer, Chaparro exteriorizó su enojo por las publicaciones periodísticas sobre el tema, acusando a la prensa de “mentirosa”. Desafió inclusive y dijo “no tener miedo” de ser publicado, además se convirtió en un verdadero “analista” de los medios de comunicación, al indicar que “el pueblo ya no cree las mentiras que se publican”.

En su chocarrera alocución, “lisonjeó” al Gobernador, indicando que era “un hombre honesto, con talento para la política”. También señaló que González Vaesken concluyó unas 200 obras que habían sido abandonadas o dejadas a medias por otras administraciones. Con sus desatinadas afirmaciones, Chaparro evidencia algún tipo de “acuerdo bajo la mesa” existente con el titular del ejecutivo departamental, que es de otro partido político. Su actitud, al igual que de otros ediles liberales, causa indignación en el seno de su partido, pues en lugar de asumir una postura crítica y actuar como contralor de la gestión del cuestionado gobernador colorado, Chaparro lo defiende a capa y espada. Fuentes de la Junta Departamental indicaron que la perorata del edil Joselino Chaparro es meramente a los efectos de crear una cortina de humo, a fin de que no sea profundizado el último caso de corrupción, denunciado por su colega Felipe Carlos Mora, quien había ventilado la existencia de obras fantasma de la Gobernación en la colonia Paranambú, distrito de Ñacunday.