La jueza de primera instancia de la niñez y la adolescencia de Hernandarias, Cinthia Galeano, hizo lugar ayer a un pedido de urgencia formulado por Domingo Penayo Vaida para salvaguardar los bienes muebles del interior de su residencia, ubicada en el lote 45, de la manzana G, del residencial barrio cerrado Paraná Country Club. Es en el marco del juicio entablado contra el cigarrillero Jorge Rodríguez Brozón, sobre desalojo con condena futura.
Fachada de la residencia con la que pretende quedarse el cigarrillero Jorge Rodríguez, en el Paraná Country Club. Ayer una jueza impidió su desmantelamiento.
Conforme referencias del recurrente, su vivienda estaba siendo desmantelada por el inquilino denunciado, quien se aprestaba a retirar los muebles embutidos (placares) de todas las habitaciones de la residencia reclamada. La disposición de la magistrada, impresa en el auto interlocutorio nº 262, con fecha de ayer, primeramente hace lugar a la medida cautelar de urgencia solicitada por la parte actora y dispone la prohibición al demandado en autos, Jorge Luis Rodríguez Brozón, de retirar los muebles embutidos que forman parte de la construcción que conforma la residencia, todo bajo la responsabilidad y caución personal de los peticionantes.
Ordenó asimismo que la parte actora preste fianza en autos a fin de responder por los daños que pudiera ocasionar la medida dictada en caso de haberlo solicitado sin derecho, librando para el efecto oficio al puesto policial nº 1 del citado complejo residencial para su toma de razón y el cumplimiento de la resolución.
Según el cargo, el oficio fue recibido ayer, siendo las 15:44, por el agente policial Luis Melgarejo. La parte actora tuvo ingentes pérdidas económicas a partir de la presentación de la denuncia de desalojo, chicaneada hasta la fecha por el denunciado, Jorge Rodríguez Brozón. Según pudo saberse, un vehículo de gran porte que contenía plásticos para envoltorios y cajas de cartón, estacionado frente a la residencia, llamó la atención de vecinos que dieron aviso a Penayo Vaida, quien, de hecho, inició una nueva acción legal contra el cigarrillero en salvaguarda de sus bienes.
En el marco de la causa principal, desalojo con condena futura, el juez civil y comercial Aníbal Duarte, había sido denunciado por prevaricato ante la Fiscalía, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y la superintendencia de la Corte. En ese sentido, el magistrado, previas conversaciones con la fiscal Natalia Montanía, habría presentado el pasado 20 de los corrientes un pedido de desestimación, calificándola de “chambona, falsa, temeraria y sin sustento legal”.
El juez Duarte olvidó que entendió en el expediente caratulado “Sol María Belén Rodríguez Ríos, sobre medida cautelar”, siendo esta hija del denunciado Jorge Luis Rodríguez Brozón, cuyo desahucio había sido ordenado en las tres instancias de la justicia ordinaria. El acto de desalojo sigue siendo dilatado por las chicanas que plantea el afectado, utilizando nombre de familiares en nuevas presentaciones ante los juzgados de Hernandarias.
