Héctor Morán, concejal municipal de Salto del Guairá.
El concejal de Salto del Guairá, Héctor Morán, pudo demostrar que los hechos denunciados no ocurrieron y logró así la desestimación de una denuncia que soportó por un supuesto hecho de violencia familiar. La Fiscalía no encontró elementos de pruebas que incriminan al edil y solicitó al juzgado de garantías de Hernandarias el fin del proceso. El hecho había tomado estado público debido a que los agentes del puesto policial del Paraná Country Club labraron un acta donde presentaron como víctima de agresión a la esposa del dirigente político, cuando que la mujer simplemente pretendió dejar precedente de una discusión entre pareja.
Poco después de un año de haber soportado un proceso judicial, el legislador municipal de Salto del Guairá, Héctor Morán, logró que el juzgado le concediera la desestimación de la denuncia en su contra a pedido de la Fiscalía, cuyos representantes no encontraron elementos que prueban la existencia de violencia alguna de parte del edil contra su esposa, Betiana Belén Samudio Barrios. El fiscal de la causa en ese entonces, Humberto Rosetti, había realizado varias diligencias para recabar pruebas contra el concejal, pero no surgió indicio alguno de la comisión del hecho denunciado. A ello, se suma que la propia víctima había declarado ante el Ministerio Público y el juzgado que el hecho, tal como informaron los policías, no sucedió.
La mujer sí reconoció que en una oportunidad mantuvo una pequeña discusión con su esposo y fue sobre lo que quiso dejar precedente en el destacamento policial. Se presume que detrás las manipulaciones estuvieron personas con intenciones de perjudicar al concejal Morán, con respetada reputación en su ciudad.
El juez de Hernandarias, Silvio Rojas, en un principio, rechazó la petición del Ministerio Público y devolvió el expediente al fiscal de la causa. Pero el representante de la sociedad, Alfredo Acosta Heyn, no habiendo pruebas incriminatorias contra el procesado se ratificó en su postura y devolvió el auto al juzgado que, por su parte, corrió traslado a la Fiscalía Adjunta, cuyo titular se adhirió al argumento del fiscal de inferior rango, concretándose finalmente la desestimación de la denuncia.
