El presidente de la Junta Municipal, Neri Chávez, sería quien está autorizando la construcción de salones en las veredas y paseos centrales del microcentro de Ciudad del Este de manera ilegal. Ayer se realizó un trabajo de ordenamiento y fueron relevados datos y se informó que el concejal estaría azuzando a los mesiteros para que se resistan a la realización de un censo en el centro de la capital departamental.
Ayer el trabajo de fiscalización de la comuna esteña consistió en la liberación de espacios ocupados por mercaderías de los mesiteros, que ocupan las veredas en una medida mayor de la que se le permitió.
Durante el relevamiento de datos, los trabajadores de la vía pública informaron que es el concejal Neri Chávez, entre otros, autorizan la construcción de casillas sin permiso de la comuna.
El miércoles último, la dirección de fiscalización realizó una intervención sobre la avenida Monseñor Rodríguez, donde siete puestos que eran mesitas fueron convertidos en salones, sin contar con el permiso de la Municipalidad. Estos locales estaban siendo ocupados por inquilinos, quienes alquilan los locales de una persona en común, lo que no es permitido por ordenanza.
Igualmente, fueron difundidos varios audios de mesiteros que invocan al edil Neri Chávez (zacariista) y proveniente de la Federación de Trabajadores de la Vía Pública, quienes afirman que se resistirán y no permitirán la realización de un censo.
El jefe de fiscalización, Javier Miranda, adelantó que se realizará un censo en setiembre, y luego de este exigirá el cumplimiento de la normativa, que prohíbe contar con más de dos puestos de ventas y tampoco permite alquilar los lugares. “Lo que ellos quieren es desestabilizar la administración de Prieto, y le invocan al concejal para amenazar que no van a permitir un censo”, expresó.
Miranda indicó que luego de que termine la investigación, serán firmados los contratos entre la comuna y los trabajadores, y que necesariamente estos deben alinearse a lo que establece la ordenanza.
Indicó que el censo no puede realizarse inmediatamente, porque requiere de una capacitación y preparación de personal suficiente, puesto que son unos 9.000 trabajadores de la vía pública, pero solamente 3.000 pagan canon a la institución municipal.
Los miembros de la Federación de Trabajadores de la Vía Pública, que son zacariistas, fueron acusados en reiteradas ocasiones de negociar con los espacios públicos, y vender puestos hasta por USD 5.000, junto con funcionarios municipales.