“Yo soy la ley en Paraguay y aquí se resuelven los problemas de esta manera”, habría dicho el cuestionado abogado Leongino Vega Morel a un estudiante brasileño que reside en el apartamento 01 del edificio VEFI, primer piso, de su propiedad, al intentar expulsar al inquilino que tiene contrato firmado hasta febrero de 2020, según denuncia formulada ayer en la Fiscalía de CDE por los familiares de Eduardo Enrique Paludo y Camila Paludo Bueno, estudiantes de medicina de la universidad privda, contiguo al edificio donde residen. La denuncia será investigada por la fiscal Juliana Giménez.
El letrado habría atropellado la habitación el pasado 5 de los corrientes, siendo las 15:30, según la filmación en computadora que los denunciantes ofrecerán como evidencia a la agencia fiscal asignada para la investigación que la Policía tipificó solamente como coacción, que solicitarán sea modificada conforme se ve y escucha en el material fonográfico. Se nota cuando el abogado exige al estudiante, que pese a estar al día con sus compromisos económicos, que desocupe la habitación y en 60 días pase a retirar la garantía de 700 dólares que los padres de los estudiantes entregaron para ingresar como inquilinos en el citado edificio.
La denuncia indica que desde el 27 de abril pasado, los inquilinos eran coaccionados para abandonar el edificio, hasta que el miércoles pasado se produjo la agresión con golpe de puño en el pecho de Eduardo Enrique, luego de apuntarle con arma de fuego a la cabeza. Los padres de los afectados señalaron ayer en sede fiscal que tienen mucho temor por lo que pueda ocurrir a partir de la presentación efectuada, pidiendo la investigación de los hechos que se visualizan en el material fílmico ofrecido como prueba.
Al denunciado Vega Morel se le atribuyó, años atrás, la modificación de montos en recibos de salarios de alrededor de 20 funcionarios del desaparecido matutino regional “Avance” para favorecer a los directivos en una denuncia por derechos laborales tramitada en un juzgado. Sería un manipulador que en el caso concreto de la presente denuncia, el hecho de coacción enunciado por el informe policial elevado a la Fiscalía resulta extremadamente corto. En otra oportunidad cayó en un control de alcotest en total estado de ebriedad y con una botella de whisky en su automóvil. La abogada Luz Céspedes, representante legal de los denunciantes, afirmó que una vez revisada la evidencia solicitará el cambio de la tipificación penal ante la unidad fiscal que entiende el caso.
