Los vecinos del barrio Inmaculada Concepción del distrito de Juan León Mallorquín del décimo departamento soportan baldíos y veredas atestados de basura, sin ningún tipo de atenciones por parte de las autoridades. Los patios baldíos son utilizados como vertederos clandestinos y constituyen un problema que no se puede solucionar sin el apoyo de los entes responsables.
Todo se debe a la desidia de las autoridades y la inconciencia de las personas. Los lugareños aseguran que hace años en los baldíos son arrojados desperdicios de todo tipo. Ellos vienen clamando sin éxito al intendente, Mario Noguera y a los concejales de turno. Asimismo, a los fiscalizadores de medio ambiente de la comuna y la Fiscalía.
En el lugar hay todo tipo de desechos: bolsas de hule, pañales desechables, botellas de vidrios, de plásticos, cubiertas en desuso y otros desperdicios. Los desechos son arrojados por las personas inescrupulosas, especialmente en horas de la noche, muchas veces para no pagar el servicio de recolección de basura y por la falta de control.
“Qué hacen las autoridades locales al respecto. El medio ambiente de la comuna y otras instituciones, tienen que identificar a las personas que tiran su basura y aplicar el peso de la ley como corresponde. Las imágenes duelen y las consecuencias que pueden acarrear son peores”, manifestó un lugareño.
Agregó que los terrenos se convirtieron en lugar de proliferación de moscas, mosquitos, alimañas y otros, además del olor nauseabundo que genera. Los vecinos solicitan que se proceda a identificar a los propietarios de los terrenos y a quienes arrojan los desechos de modo a sanear la zona que se torna un peligro para la salud de los moradores y transeúntes.
