Unos 2.500 docentes que realizaron un curso de capacitación en la Universidad San Ignacio de Loyola de Asunción (USIL), pero las certificaciones carecerían de legalidad, se manifestaron ayer frente a la institución a los efectos de reclamar el reconocimiento de dicho instrumento. De acuerdo con los antecedentes, los directivos de la USIL fueron denunciados por plagiar el proyecto que fue presentado al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) y aprobado durante la administración de Enrique Riera.
Los certificados otorgados a los docentes de todo el país mediante capacitaciones brindadas por la USIL quedarían anulados, tras la denuncia formal presentada por el autor del proyecto ejecutado por dicha casa de estudios, César Augusto Sánchez, de nacionalidad peruana. El MEC había adjudicado a finales del 2017 e inicio del 2018 a la USIL, la suma de G. 8.800 millones para la capacitación de docentes de todo el país. Sin embargo, el programa utilizado para la instrucción de los 2.500 docentes fue una burda imitación del proyecto presentado por el peruano, quien se encuentra en el país, por lo que entabló una querella formal, por lo que los certificados serían anulados. De esta situación se desprende que, de acuerdo a la representante legal de la Universidad San Ignacio de Loyola, María Julia Garay Sotomayor, en su declaración ante la justicia, el exministro de Educación de la era Horacio Cartes, Enrique Riera, supuestamente estaba en conocimiento de esta irregularidad y, pese a ello, adjudicó a la USIL el millonario monto. Dichas declaraciones revelan que habría un “negociado” detrás de este curso de capacitación, que afectaría a altas autoridades de la era Riera y al propio exministro de Educación.
A raíz de ello, docentes aglutinados en diversos sindicatos se manifiestan este lunes frente a la universidad San Ignacio de Loyola, ubicada sobre la avenida Venezuela de Asunción, donde reclamaron la entrega de sus respectivos títulos. Son más de 2.500 maestros los afectados que no han recibido su título y por ende no pueden recibir su gratificación ni aumento salarial, según se exteriorizaron en la manifestación.
El propietario de la USIL, cuya matriz se encuentra en el Perú, Raúl Diez Canseco, busca resolver este conflicto, por lo que está conversando con las autoridades del MEC y los docentes afectados. En tanto, los manifestantes, mediante un cartel, se dirigieron a Diez Canseco, manifestándole: “Raúl Diez Canseco ladrón, entrégame mi título”.