En un trabajo conjunto entre agentes de Investigación de Delitos de la Policía Nacional y el Ministerio Público de Ciudad del Este se logró desarticular una gavilla de asaltantes, integrada por al menos seis personas que el fin de semana último se alzaron con más de G. 138 millones de la distribuidora de Pollos Don Juan, ubicada en el Km 20 de Minga Guazú. Entre los aprehendidos están tres guardias de seguridad, un jornalero y dos hombres que residen en São Paulo, Brasil. Cinco de ellos fueron detenidos ayer durante allanamientos llevados a cabo en distintas partes del décimo departamento y tras los cuales se recuperaron parte del botín y se incautaron varias evidencias relacionadas al robo. Asimismo, en una laguna, ubicada en el Km 18 Monday, fue hallada la caja fuerte donde estaba el dinero. Uno de los integrantes de la banda ya se habría fugado al Brasil con su parte del millonario robo y continúa prófugo.
Durante los procedimientos fueron detenidos tres guardias de seguridad. El primero se trata de Guido Manuel Viveros Rojas, de 36 años, domiciliado en el Km 24 Acaray de Minga Guazú, quien era empleado de la empresa Puma del Este, y cubría en horario diurno el local de la distribuidora de Pollos Don Juan. El mismo sería el funcionario infiel que facilitó los datos a los demás integrantes de la banda, integrada por otro guardia de seguridad, individualizado como Artemio González González, de 39 años, domiciliado en el barrio Santa de Ciudad del Este, quien también trabajaba en la misma empresa, y custodiaba la Farmacia San Lorenzo, ubicada sobre la supercarretera, cercanías del Hospital Regional de Ciudad del Este. El tercer guardia de seguridad detenido está identificado como Ernesto Osorio, de 29 años, domiciliado en el barrio San Miguel de Ciudad del Este, funcionario de la empresa GPS SA y cubría el local comercial denominado Cell Shop, en el microcentro de esta capital departamental.
El cuarto integrante de la banda es Dionicio Alejandro Barrios Caballero, funcionario del shopping Arena de CDE, que se desempeñaba como limpiador en dicho lugar, el mismo supuestamente se encargó de contactar con un marginal, amigo suyo, de nombre Blas Antonio Oviedo Benítez, quien también ya está detenido. Este último, supuestamente, se comunicó con un tal Loiro, un brasileño residente en São Paulo, Brasil, quien vino al Paraguay solo para cometer el robo y tras el hecho fue nuevamente a su país con parte del dinero obtenido.
Según los datos, la gavilla perpetró el hecho en horas de la madrugada del domingo 31 de marzo. Uno de los integrantes ingresó por el techo y luego abrió los portones y puertas a los demás cómplices. Los bandidos alzaron una caja fuerte de la firma Prosegur que contenía más de G. 138.000.000 en un automóvil y se dieron a la fuga. La caja de metal fue hallado ayer en un estanque de agua ubicado en el Km 18 Monday
EVIDENCIAS
Durante la serie de allanamientos, la comitiva fiscal-policial se incautó varias evidencias relacionadas el millonario robo, entre ellas parte que la suma escamoteada, que totaliza G. 51.874.000; una escopeta calibre 12mm, producto del hurto del local de Pollos Don Juan; un revólver marca Doberman, calibre 32mm; un revólver calibre 38mm, con mango de madera; una pata de cabr, una pinza de fuerza, una taladro eléctrico de la marca Black & Decker, destornilladores, cortahierro, varios aparatos celulares, un automóvil de la marca Toyota Allion, blanco, con chapa UAH 917, y la caja fuerte de la empresa Prosegur que fue localizada en el agua del Km 18, a 3.000 metros de la ruta VII, que luego de ser violentada fue arrojada por los bandidos al cauce hídrico.
OTROS ROBOS
Según los investigadores, este sería apenas el primero de una seguidilla de robos que estaba siendo planeado por la banda desarticulada. Tenían en la mira todos los locales donde trabajaban los guardias detenidos. El próximo blanco de la gavilla era Cell Shop, donde habrían tenido información que, supuestamente, se maneja mucho dinero y tenían todo preparado para atracar en negocio.