A parte de ofrecer un pésimo servicio, la Compañía Paraguaya de Comunicaciones (COPACO) de Ciudad del Este, tiene denuncias por presuntos actos de corrupción. La exigencia de pago de coimas para la instalación de líneas o reposición de servicios de parte de técnicos es una práctica nefasta que nunca termina, según los usuarios. Los clientes piden que se intervenga la administración regional para que mejoren el servicio y terminar con las viejas prácticas de los funcionarios antiguos.

Los usuarios protestan por el mal servicio que ofrece la empresa en Ciudad del Este, pues pese a los reiterados reclamos que realizan no tienen respuesta a sus problemas de conexión o de línea telefónica.
Los usuarios afirman que por servicios de mantenimiento de línea, los funcionarios piden coimas y si no se paga nunca repararan, situación que demuestra una falta de seriedad y deshonestidad por los responsables del ente estatal, teniendo en cuenta que no hacen nada para revertir la situación.
Los técnicos hacen todo tipo de artimañas para pedir dinero a los usuarios, a fin de hacer reconexiones, pues en algunos casos solicitan hasta 400 mil, supuestamente, para compra de cables. Los usuarios están cansados de soportar el pésimo servicio de la institución estatal.
Ciudad del Este cuenta es la que cuenta con la mayor cantidad de usuarios en el Alto Paraná. Sin embargo, su servicio telefónico es pésimo, por lo que piden a los altos mandos de Copaco que actualicen los equipos, realicen los mantenimientos constantes y que, en caso de algunos problemas técnicos, que resuelvan siempre en la brevedad posible, incluso, solicitan que se intervenga la empresa.
La línea también se vende en poco tiempo si no se soluciona de manera rápida, pero para reparar se debe pagar coima, según los usuarios, quienes aseguran que Copaco hay corrupción.
Los técnicos y funcionarios antiguos serían los primeros en estar involucrados en los actos de corrupción, pues estarían vendiendo los cables de la institución a los clientes de manera irregular. El ente estatal debe colocar en la calle la boca de servicio para que el cliente pueda hacer sus conexiones, pagando lo que corresponde por el trabajo, pero los funcionarios piden coimas para la compra supuestamente de los materiales.