Pescadores de la zona del Km 14 Monday hallaron ayer a la tarde el cadáver de la mujer que el lunes a la mañana se lanzó al río desde el puente del Km 14, que une la ciudad de Minga Guazú con Los Cedrales. El cuerpo sin vida de la joven estaba a unos 2.500 metros, aguas abajo del lugar de donde se arrojó al cauce hídrico. Buzos de la Marina, apoyados por bomberos voluntarios, sacaron los restos de la mujer, en cuya cintura aún conservaba su aparato celular, que fue entregado al Ministerio Público.
Eran las 12:45 de ayer, cuando pescadores que se encontraban navegando el río Monday visualizaron un bulto negro bajo el agua. Inmediatamente dieron aviso a los agentes de la Marina, cuyos buzos acudieron al sitio y se lanzaron al agua y confirmaron que se trataba del cuerpo sin vida de Claudia Núñez Ortiz, de 27 años, quien en vida era domiciliada en el Km 14, fracción Norma Luisa de Minga Guazú.
Con la ayuda de los bomberos voluntarios, el cadáver de la mujer fue sacado y llevada a la orilla del río, y posteriormente dieron participación a la Policía Nacional. En la cintura de la mujer, los intervinientes encontraron el celular de la joven, que entregaron al Ministerio Público. Según el médico forense de la Fiscalía, la causa de muerte fue diagnosticada como asfixia mecánica por ahogamiento. Tras los trámites de rigor, la fiscal de turno, Carolina Rosa Gadea, dispuso la entrega del cadáver a sus familiares.
EL CASO
El lunes, alrededor de las 08:00, Claudia Núñez Ortiz, salió de su casa al mando de su motocicleta Kenton, Fusión, roja, sin chapa, y se dirigió hasta el puente del Km 14 que une Minga Guazú y con Los Cedrales. En el medio del puente la joven aparcó su biciclo y se sacó sus zapatillas, para luego lanzarse al Monday. Según los datos, la mujer se cansó de los sucesivos maltratos y celos de su novio y tomó la drástica decisión de acabar con su vida.
QUISO ARROJARSE
Cabe recordar que alrededor de las 14:00 de ese mismo día, Alexis Alcaraz acudió al puente apenas se enteró que su novia se había arrojado al agua y para sorpresa de los curiosos que estaban en el sitio, el hombre se paró al borde de la pasarela, que ni siquiera cuenta con baranda, y amenazó con lanzarse desde lo alto. Afortunadamente, sus familiares y algunos testigos evitaron que se tirara al río.