Javier Zacarías Irún no solo está perdiendo en el terreno político, sino también en el plano judicial. Su intento por evitar su desafuero fue truncado por el juez penal de Garantías Gustavo Amarilla. Mañana será tratado el pedido de desafuero y en la oportunidad, la Comisión Permanente del Congreso Nacional deberá definir si convoca o no a sesión extraordinaria para tratar el pedido presentado por un grupo de senadores.
El abogado Ricardo Preda, del equipo técnico que defiende jurídicamente al legislador paranaense, planteó una reposición con apelación contra la providencia por la cual se recibió la imputación del senador colorado Zacarías Irún. Además, apeló el pedido del desafuero del legislador, que ya fue remitido a la Comisión Permanente del Congreso.
Con esta diligencia, el juez penal de Garantías Gustavo Amarilla rechazó los incidentes planteados por la defensa del senador Javier Zacarías Irún contra la admisión de la imputación.
Con esta determinación, la Comisión Permanente del Congreso Nacional tiene vía libre para analizar si corresponde o no el pedido de un grupo de senadores, quienes solicitaron se trate en una sesión extra el pedido judicial de desaforar a Zacarías Irún, con el argumento que este no entorpezca la investigación.
Todos los intentos chicaneros interpuestos hasta el momento por Zacarías, fueron totalmente rechazados por la Justicia, en un claro mensaje que está totalmente debilitado su fuerza política, luego de la visible influencia que ejerciera sobre esta instancia de poder, en la época que era apadrinado por el hoy empresario tabacalero Horacio Cartes, cuando fungió de presidente de la República. Aunque siguen siendo amigos inseparables, ambos políticos están sintiendo el rigor de perder unas elecciones.
Este nuevo escenario le cuesta entender a Zacarías que intenta trabar el proceso judicial y político con todos los medios a su alcance y, no ha de extrañarle a la ciudadanía, que intente flirtear con el poder político y administrativo, ostentado hoy día por el presidente Mario Abdo Benítez, con tal de zafarse de todo el proceso judicial que, hasta el momento, dio señales que no se someterá a sus caprichos, tal como lo hiciera en un tiempo reciente.
Aunque la ciudadanía espera medidas judiciales más implacables que conlleve a la privación de libertad de Javier Zacarías Irún, el mensaje de los esteños es claro, en el sentido que, en esta ocasión ya no permitirán que Zacarías Irún sea amparado por los estamentos de poder que deben impartir Justicia y dar tranquilidad a la población.
