El juez José Ariel Diarte aprovechó su estadía como juez penal de feria y benefició con arresto domiciliario a un miembro de la organización criminal brasilera, Comando Vermelho, Fabio Souza Dos Santos. Sin embargo, antes ser cumplida su resolución, el Gobierno decidió expulsar al temible brasileño sindicado de haber cometido varios asesinatos en su país.
Indudablemente, la feria judicial sigue siendo aprovechada por los jueces que cubren a sus colegas durante enero. Esto se evidencia con la decisión tomada por el juez José Ariel Diarte, quien ignoró la orden de detención internacional que pesaba contra el temible delincuente brasileño, Fabio Souza Dos Santos. El magistrado le concedió arresto domiciliario, pese a que el citado no contaba con una casa propia en la ciudad, es decir, no había una mínima garantía que pudiera cumplir con la disposición judicial. Pero el magistrado, tras enterarse de la expulsión del peligroso delincuente, argumentó su determinación sosteniendo haber actuado en base en los documentos que obran en el expediente. El extranjero soportaba un proceso por producción de documentos no auténticos y transgresión a la ley de armas. La causa era entendida originariamente por la jueza Alba Meza.
Souza Dos Santos fue detenido en Minga Guazú durante un control policial junto con otro presunto narco que fue liberado en tiempo récord, debido a que no contaba con antecedentes.
