La imputación del rector de la Universidad Nacional del Este (UNE) Gerónimo Laviosa, su antecesor Víctor Brítez y los decanos de la Facultad Politécnica y Filosofía, Eustaquio Martínez y Blanca Tottil de Moreno, respectivamente, fue literalmente aplaudido por miles de estudiantes. Además de los citados, están en la lista de procesados otras 16 personas, en su mayoría, directivos de la casa estudios superiores.
La imputación tardó dos años para finalmente darse, pese a que las denuncias fueron bastantes concretas. Los alumnos de la Facultad de Filosofía califican como un “aire de justicia” la imputación de Blanca Tottil, pues de la citada casa de estudios, 17 estudiantes fueron imputados y posteriormente suspendidos por un año para continuar con sus respectivas carreras, en el marco de una decisión totalmente arbitraria, según califican.
UNA MAFIA
Centenares de alumnos aseguran que el sistema de manejo en la Universidad Nacional del Este es una verdadera mafia. Es que normalmente los rectores y otras autoridades actúan con bastante hermetismo y manejan el dinero público como una empresa privada.
En el 2015, una manifestación iniciada por los estudiantes de la Universidad de Asunción se propagó al Este del país y los alumnos de la UNE también tomaron la misma iniciativa. Sin embargo, no lograron en todo su objetivo, pues estudiantes de algunas facultades que denunciaron las irregularidades terminaron imputados, como el caso de la Facultad de Filosofía. Allí, 17 estudiantes fueron procesados por supuestamente dificultar el desarrollo normal de las actividades académicas. Como si todo fuera poco, la decana, Blanca Totil de Moreno, ahora imputada, influencia mediante, logró que 18 alumnos que formaban parte del grupo de denunciantes fueran suspendidas durante el año lectivo.
RECTOR
El que logró “enfriar” todo gracias a su poder fue el rector Gerónimo Laviosa. Sin embargo, dos años después ahora está imputado. El citado es sindicado de haber encubierto a los principales directivos de las demás unidades académicas.